La vida es jazz.
A. Medrano Mieres
I
Sin querer reúno cosas
durante el día,
la mayoría de ellas
impresiones y detalles fútiles de la realidad
nadie puede resistirse
durante las noches a que todo esto pase a ser material susceptible de los
sueños
una mirada en la calle
una gasolinera prendida en
llamas
la actitud autómata en los
servidores públicos y almaceneros.
II
En cada conversación donde hablo
de mí,
Me refiero consustancialmente
a esta ciudad
he recorrido tanto cada una
de sus calles como me he referido a ella
cada uno de sus eriazos que conectan
otras calles
podría salir a caminar con
los ojos cerrados y no perderme
para esto me he entrenado en largas noches de meditación insomne y embriaguez
la alternancia solitaria en
partes iguales de reclusión y caminatas nocturnas
hay cosas que podrían mover a
engaño,
a pensar que siempre ha sido
la misma ciudad
sin embargo yo sé que es
distinta
cada uno de sus cambios son noctívagos
e imperceptibles
tal cual a los que
experimentan las plantas
todo lo que en la realidad
termina siendo un proyecto fallido
es la proyección de un mal
sueño
lo único real acá., lo he
dicho hasta agotar el recurso de la imagen
es el frio y la lenta
sorpresa de las babosas en el baño
también el humor y el mal
genio de los borrachos.
Por ultimo no hay cosa más
real que el mal gusto
y la exposición de los
iniciados a la vida política.,
nada más deben hacer que aprender
bien todas sus tácticas
y siempre serán salvados.
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